Aprender
Comprendí el mensaje.
Sinceros silencios, ausencia,
a veces no hacen
falta palabras
y en esos austeros de nada…
se dice todo, sin dejar huella.
El alma aguarda expectante,
es un ir y venir, intercambio
sutil, que la ternura deja.
Comprendí el silencio,
es un sin fin de hastío,
a veces, aun queriendo…
ese sentimiento asoma,
compleja dolencia del alma.
Aprendí de mil errores,
y el Supremo guía
en este laberinto, y aprendí.
Ya no espero nada
o quizá lo espero todo,
es la esencia vana
llamada humana,
que arrebata al sol
de su calor naciente.
Aprendí el mensaje
que deja el olvido.
© María del Carmen
Menéndez García
Tu opinión es importante...
Hola María del Carmen, tienes un estupendo blog lleno de bellas palabras y con mucho espacio por donde dar largos paseos, sin pedir permiso me quiero quedar como tu seguidor y así lo hago. Seguiré pasando por aquí sin duda, quisiera que visitaras mi blog, soy fotógrafo y que te hicieras seguidora si te gustan las imágenes.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo desde Gran Canaria. Saludos